Francia anunció el viernes el fin de la epidemia de gripe aviar en todo el territorio, que desde su aparición el pasado mes de noviembre ha afectado sobre todo a las explotaciones de patos del suroeste y ha obligado a numerosos sacrificios masivos.

El Gobierno publicó un decreto en el Diario Oficial en el que indica que el nivel de riesgo de esta enfermedad --que afecta a las aves, pero muy raramente a los mamíferos y en concreto a las personas-- es «insignificante» en toda la Francia metropolitana.

Eso significa suprimir una serie de dispositivos restrictivos que se habían activado para impedir la propagación de la epidemia, en particular el confinamiento de los animales.

CUARENTENA // No obstante, continúa habiendo una cuarentena que se prolonga hasta el 28 de mayo del 2017, y que concierne a 1.134 municipios en los departamentos de Haute-Garonne, Gers, Landes, Pyrénées-Atlantiques y Hautes-Pyrénées, próximos a la frontera española.

Un día después se podrán reanudar allí «las actividades de cría de palmípedos (...) siempre y cuando se cumplan las estrictas condiciones de revisión médica y de medidas de seguridad», señaló el Ministerio de Agricultura.

La epidemia llegó a Francia con aves migratorias y condujo a las autoridades a decidir el sacrificio de millones de ellas.

Según la definición de la Organización Internacional de Sanidad Animal, la gripe aviar es una enfermedad vírica altamente contagiosa que afecta a varias especies de aves productoras de alimentos (como pollos, pavos, codornices o pintadas), así como a aves de compañía y aves silvestres. En algunas ocasiones, los mamíferos, incluidos los seres humanos, pueden contraerla.

El controvertido fenómeno provocó daños sensibles en esta nación europea productora de foie gras a partir del hígado hipertrofiado de pato, un producto emblemático de la cocina francesa y ampliamente comercializado en el resto de Europa.

NUEVA CRIANZA // Tras el fin de la epidemia, en próximas semanas los agricultores podrán comenzar nuevamente la crianza de dichas aves, por lo cual se prevé que el foie gras esté ampliamente disponible para las fiestas de fin de año, en las cuales su consumo constituye una tradición.