El creador de Twitter, Jack Dorsey, ha caído en las redes de la pasión. En víspera de Año Nuevo los paparazzi le fotografiaron junto a la bella Lily Cole, considerada una de las top model más famosas de Gran Bretaña, habitual de firmas como Chanel, Hermès y Christian Lacroix. Les pillaron romanticones (entre abrazos y besos) a bordo de un lujoso yate en la isla de San Bartolomé, en el Caribe. La prensa inglesa detalla que el joven multimillonario, de 31 años, desembolsó más de 200.000 euros para sacar a pasear a Lily (y amigos como el productor de música Rick Rubin) durante una semana en el Odessa, el nombre de la embarcación. Calderilla para una fortuna estimada en más de mil millones de euros. El joven empresario, que fundó Twitter en 2006, es el presidente ejecutivo de esta compañía digital valorada en más de tres mil millones de euros y con más de 500 millones de usuarios en todo el mundo. Por su parte, Lily es considerada una de las modelos más famosas del Reino Unido tras haber posado para grandes fotógrafos como Juergen Teller o Irving Penn, quienes le han llevado hasta las portadas de Vogue, Playboy y Numéro, entre otras revistas.