Con Jerry Lee Lewis, todo queda en casa en cuestiones de corazón. Otra vez. El pionero del rock, que en su juventud incendió pianos y moral casándose cuando tenía 22 años de edad con su prima Myra Gale Brown, de 13, ha vuelto a dar a los 76 años el sí, quiero. Y esta vez, la séptima en su carrera amorosa, ha convertido en su esposa a Judith Coghlan, una mujer que hasta hace solo dos años estuvo casada con Rusty Brown, hermano de Myra Gale, su primera mujer, y también primo del propio Jerry Lee Lewis.

Pero esta vez ya no hay escándalo sino, más bien, una bonita historia de amor en la tercera edad. Fue el primo Rusty quien hace unos años pidió a su esposa que cuidara de Lewis, aquejado de serios problemas de salud en los últimos tiempos. Y en esos cuidados empezó a surgir algo distinto al amor familiar.

"Al principio no era romántico, pero después de seis meses supimos que algo estaba pasando, aunque no estábamos seguros de qué", ha contado ella al Natchez Democrat, el diario local de Misisipí. Este es el rotativo que ha publicado los detalles y además las fotos de la íntima ceremonia, que se celebró el pasado día 9 de marzo en una casa privada ante la presencia de un puñado de familiares, amigos y, como no, un reverendo.

UN CUARTO DE SIGLO DESPUÉS Aunque el amor ha surgido ahora, Judith ya llamó la atención del músico, apodado The killer, la primera vez que ambos se vieron. Fue hace más de 25 años, cuando el primo Rusty llevó a su entonces novia a un espectáculo de Lewis en Las Vegas para presentarla a la familia. El músico entonces dijo a su primo: "Si no te casas con ella, lo haré yo". Saltándose la primera parte de la hipótesis de entonces, ha acabado haciéndolo, aunque un cuarto de siglo después.

Judith pidió el divorcio de Rusty en el 2010 y esa misma Navidad Lewis, que en el 2004 se divorció de la que había sido su esposa durante 20 años, Kerrie McCarver, le regaló un anillo. Meses después le aclaró que era de compromiso. Y más tarde, un día que veían una película antigua, él le dijo: "Casémonos".

PROBLEMAS DE SALUD Los problemas de salud de uno de los padres del rock, que tuvo cuatro hijos en sus anteriores matrimonios (dos de los cuales han muerto), alteraron los planes de boda. El hombre al que en el cine interpretó Dennis Quaid en Gran bola de fuego tuvo que ser ingresado y quería celebrar el enlace incluso en el hospital.

Ella le convenció de que esperasen a que le dieran el alta y, aunque no pudieron darse el sí, quiero como él ansiaba (en una casa en Ferriday), acabaron haciéndolo en Natchez. "Una vez que nos sentamos frente al reverendo --dijo la nueva esposa-- todo salió bien. Ninguno de nosotros siente haber estado casado antes, así que fue como la primera vez para ambos".