La reina Sofía visitó ayer las oficinas de la Fundación Pasqual Maragall en el Parque de Investigación Biomédica de Barcelona (PRBB) para conocer los proyectos de investigación sobre el alzhéimer. Era la primera vez que la soberana recorría las instalaciones, y lo hizo cogida del brazo del expresidente de la Generalitat de Cataluña, con quien mantiene una relación muy afectuosa. Durante el encuentro, que duró una hora y media, la Reina conoció de primera mano las novedades de los proyectos que impulsa la entidad, así como a los miembros del patronato, el consejo de mecenazgo y el equipo científico.
Además de Maragall, la monarca ha estado acompañada por Diana Garrigosa, vicepresidenta de la fundación y esposa del expresidente catalán, la ministra de Sanidad, Ana Mato, el conseller de Salud catalán, Boi Ruiz, el alcalde Barcelona, Xavier Trias y la delegada del Gobierno, María de los Llanos de Luna, además del director general de la fundación, Jordi Camí, entre otras personalidades.
La Fundación Maragall y la Fundación Reina Sofía mantienen una estrecha colaboración. El pasado año promovieron conjuntamente la iniciativa Alzhéimer Internacional 2011, Año Internacional del Alzhéimer, que culminó con la celebración de un congreso internacional en Madrid que reunió a más de 2.000 profesionales del ámbito de la investigación de la enfermedad. La reina Sofía está muy interesada en apoyar a las entidades que trabajan en proyectos para la detección precoz de esta grave enfermedad degenerativa.
Con esta visita, Sofía terminó una intensa jornada de trabajo llevda a cabo en Barcelona, que inició por la mañana junto al Rey con la entrega de despachos a una nueva promoción de jueces. A última hora de la tarde, la Reina regresó a Madrid en el AVE para reunirse con su hija Cristina en la Zarzuela.
