La Generalitat de Cataluña ha ordenado sacrificar a 17.300 patos de engorde tras detectar un primer brote de gripe aviar en una granja al aire libre ubicada en el municipio de Sant Gregori (Girona). La consellera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, Mertixell Serret, informó ayer de que los protocolos están funcionando «al máximo» y se han inmovilizado los animales de las seis granjas existentes en tres kilómetros a la redonda de la explotación afectada. EFE