Cada vez son más los taxistas de ciudades españolas que se apuntan al uniforme o a seguir un protocolo de vestimenta más formal como una de las medidas para mejorar la imagen ante la competencia de Uber y Cabify. En Vigo, por ejemplo, están ahora ante una nueva ordenanza municipal, pendiente de aprobación, que no contempla el uso del pantalón corto. Como en Barcelona, los taxistas vigueses no podrán llevar, entre otros, ni bermudas, tirantes, chándal, ropa deportiva ni chanclas. Algunos taxitas se han llevado las manos a la cabeza y amenazan con vestir falda si les prohíben el pantalón corto.

Es el caso de la asociación Élite Taxi Vigo, que ha presentado alegaciones para evitar que se elimine totalmente el pantalón corto y proponen una variante menos playera y más de vestir, como sucede en otras ciudades españolas, sobre todo, costeras. Es el caso de Palma de Mallorca, donde tras una larga polémica sobre la indumentaria se ha admitido esta prenda.

El declaraciones a 'La Voz de Galicia' el presidente de la entidad, Roberto Costas, ha explicado: "Nuestra propuesta es que se permita pantalón corto de vestir, chino o de pinzas, hasta la rodilla, con camisa o polo, y no la prohibición total. Ya hay compañeros que dicen que, como se elimine, llevarán faldas: la legislación actual no las prohíbe".