El temporal de nieve siguió haciendo estragos ayer en media España y se convirtió en todo un temporal político. Tanto es así que la oposición --PSOE, Podemos y Ciudadanos-- salió en tromba a exigir responsabilidades al Gobierno de Rajoy, que ayer anunció que expedientará a la empresa concesionaria de la AP-6. Mientras tanto, la nevada se recrudeció por la tarde y obligó a cortar de nuevo esta importante vía de comunicación madrileña, entre otras carreteras.

Tras una noche del sábado en la que entre 3.500 y 4.000 conductores estuvieron completamente bloqueados en la AP-6, y después de que durante unas horas la circulación se abriera, la Dirección General de Tráfico volvió a cortar la autopista del Noroeste a última hora de la tarde de ayer. Ante el empeoramiento del temporal, también se prohibió el tráfico en la AP-61 y la AP-51, que enlazan Madrid con Castilla y León.

Estas dos autonomías eran, al cierre de esta edición, las dos más afectadas, hasta el punto de que la segunda recomendó a las familias de Ávila y Segovia no llevar a sus hijos hoy a las escuelas. El ejecutivo autonómico anunció que tratará de mantener los centros educativos abiertos en su horario habitual, pero también indicó que se suspenden las rutas escolares afectadas por la nieve.

Mientras tanto, la situación mejoró ayer en otras regiones donde el temporal tendía a remitir. Así ocurrió en La Rioja o Navarra, donde la práctica totalidad de las carreteras fueron ayer abiertas al tráfico tras un sábado muy complicado. En Navarra, el Gobierno autonómico agradeció a los vecinos y autoridades de Alsasua su solidaridad con los cientos de personas que tuvieron que pernoctar en los lugares habilitados en la localidad al quedar atascados por el cierre de la Autovía del Norte (A-1).

CRISIS POLÍTICA // El mal tiempo originó ayer una crisis política de primer nivel, después de que el Gobierno central decidiera abrir un expediente informativo a la concesionaria de la AP-6, Iberpistas, después del caos vivido en la noche del sábado al domingo. En este sentido, el ministro de Fomento, Iñigo de la Serna, se comprometió a comparecer en el Congreso cuando la compañía le remita la información.

Las respuestas no fueron suficientes para la oposición. El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, exigió que el Gobierno y la DGT expliquen la «absoluta falta de previsión» que derivó en un «caos». También hicieron esta petición Podemos y Ciudadanos.

El director de la DGT, por su parte, echó balones fuera y culpó a los conductores del monumental atasco. «Se conocía con antelación la que iba a caer», dijo.