Hay quien piensa en Barcelona ¿verdad? que a Ada Colau no le inquieta en exceso, demasiado, el problema del ‘top manta’. Quien sabe, igual la alcaldesa de Barcelona se ha paseado en más de una ocasión ¿difícil, no? por el mercadillo ¡que mercadillo! ¡toda una manzana! de Jalan Petaling, en Kuala Lumpur, capital de Malasia, donde todo, todo, todo, se copia, se imita, se vende, se plagia. Pura ganga, Jalan Petaling es un ‘top manta’ a lo bestia, legal, abierto, sin un solo policía a su alrededor.

Un barrio entero, edificios al completo, calles inmensas repletas de tiendas, de tienduchas, de almacenes, de lugares recónditos donde todo se copia, donde todo lo falso --o de imitación-- se vende. Donde si el ‘peluco’ falso, que compraste el año pasado no funciona, te cambian la pila; donde si se ha roto la correa, te ponen una nueva porque se acuerdan de ti. "Ohhhh, amigo, amigo, sí, Messi, Messi". Les das el reloj, te das una vuelta y te lo devuelven como nuevo.

En la calle vende lo más barato, material de batalla pero, si quieres, te llevan a sus garitos, en pisos inmundos, donde te venden las copias 'auténticas' más caras

GARANTÍA PERSONAL

En Jalan Petaling todo es falso, pero hay clases. Nada más entrar en el mercado, lo primero que te encuentras, cómo no, es el puesto más de moda, el que vende los relojes de mil colores ICE Watch, que en Barcelona cuestan unos 80 euros. Pero aquí, valen cinco. Y si te llevas tres, solo tres. Hombre, claro, si quieres un Rolex o un Hublot, te costará algo más, más o menos unos 25 euros. Y clavadito, clavadito, al que te vende Rabat. Y hasta con la garantía. "La garantía soy yo, amigo, amigo, Messi, Messi", te dice el del puesto ambulante.

Te adentras y buscas alguna tienda un poquito mejor. Y la encuentras. Inmensas estanterías con un montón de relojes, todas la marcas, todos los modelos. Y todos funcionan. De momento. Eso sí, si te fijas un poco descubrirás un cartelito, allá arriba, en lo alto de la estantería, que pone en inglés: "Goods sold are not returnable". Está clarísimo: los artículos vendidos no se devuelven. Insisto, no se devuelven, pero si lo compraste el año pasado y se te ha acabado la pila, te ponen una nueva.

CAMISETAS 'OFICIALES' A 7 EUROS

Vas caminando y, de pronto, la tienda de camisetas. Del Barça, claro. Casi tooooodas son del Barça. Ahí tienen la de Messi con la 'senyera' y el 10, y la de Neymar Júnior, claro, con el 11, por 7 euros. También ves a un muchacho vendiendo gafas de sol de las mejores marcas con la camiseta de Marc Márquez con el 93, recientemente falsificada, porque es el chico de moda, claro. Todo está controlado, todo, incluso la posibilidad de que te roben. Si te roban, te encuentran al ladrón. Bueno, eso te dicen al entrar. Yo me lo creí.

Pero lo mejor, lo más divertido es cuando acudes a uno de los puestos de bolsos, de esos que en Barcelona cuestan 2.500 euros, de Chanel, de Gucci, de Louis Vuitton. En los puestos de la calle te los venden por 50 o 60 euros. Pero si tú te acercas discretamente, o no tan discretamente, a la dependienta del chiringuito y le dices al oído "the good one" --es decir, "quiero los buenos"--, silba y aparece un mazas, su hermano, claro, o su primo, o su novio, o su marido. Y te dice: "Venga, venga".

LUGARES SECRETOS

Y entonces, lo importante es no asustarte. Nunca. Te lleva por callejuelas, te mete en un edificio casi derruido, pero que no lo está. Llama al ascensor, se abre la puerta y, en un rincón del ascensor, un muchacho, sentado en un taburete de plástico, aprieta el botón del sexto piso. Llegas a unas galerías, más derruidas aún, y a una inmensa cristalera opaca. "Amigo, amigo, Messi, Messi, no fotos, no fotos". Pica con los nudillos en la puerta de cristal y se abre un mundo de lujo que, se lo juro, ya quisieran para ellos los de la tienda de Loewe de paseo de Gràcia. Brutal.

Están todos los bolsos del mundo, de todas marcas, con fundas de tela con la firma grabada, con tarjetas de garantía: Gucci, Loewe, Louis Vuitton, Chanel... "Amigo, amigo, Messi, Messi, estos buenos, buenos, piel de Australia". Y empiezas a negociar. Y acabas pagando por ese Chanel rojo de correa de cadena, esa cartera que se ve a diario en el Liceo, unos 85 euros, cuando en paseo de Gràcia vale 1.900.

Tremendo, de verdad. Ríanse ustedes del 'top manta'. "Amigo, amigo, Messi, Messi". Todo legal. Todo al aire. Todo un negocio.