Una mujer ha sido condenada por el juzgado de lo Penal nº 1 de Castellón a dos años y un día de cárcel por robar comida en un conocido hotel de Benicàssim. La ladrona se apoderó de cajas de Nescafé, sacarina, queso rallado o jamón en láminas, entre otros alimentos. La sentencia ha sido confirmada en su totalidad por la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Castellón.
Según reza el documento judicial, al que ha tenido acceso Mediterráneo, los hechos se remontan al 4 de agosto del 2012, cuando la ahora condenada, alrededor de las 23.00 horas, entró por la puerta de servicio del hotel y, tras llegar a la cocina, romper la puerta de un armario, el sujetador del candado de otra, forzar una puerta de metal y abrir un par de taquillas de personal, se apoderó, con propósito de propio beneficio, de cuatro barquetas de lomo asado, cuatro cajas de sobres de Nescafé, tres barquetas de queso rallado, cinco cajas de sobres de Nesquik, tres cajas de sobres de sacarina y seis kilogramos de jamón en láminas, efectos que han sido pericialmente tasados en la cantidad de 413,70 euros que no han sido recuperados.
Durante su acción delictiva ocasionó una serie de desperfectos que han sido pericialmente tasados en 188,30 euros.
La acusada declaró en el juicio que no recordaba haber entrado al hotel a robar, pero esto resultó contradictorio, pues, tras ser detenida, sí que reconoció que había accedido por la fuerza a la cocina y que se había apoderado de diversos alimentos.
Además, como consta en la sentencia, la declaración autoinculpatoria en primera instancia está corroborada por el visionado del cedé que contiene las imágenes grabadas por las cámaras de seguridad del hotel, donde se aprecia cómo la acusada salía a la calle cargada con bolsas llenas de comida procedente de la cocina de dicho establecimiento.
El juez tuvo en cuenta la testifical del director del hotel y las de la Policía Local de Benicàssim y de la Guardia Civil que, tras visionar las imágenes, identificaron a la acusada, a quien conocían porque había sido detenida en anteriores ocasiones, siendo la última hacía menos de un mes y, justamente, por sustraer comida en el mismo hotel. El juez impone a la ladrona, además, el pago de 602 euros de indemnización al establecimiento. H
