El Juzgado de lo Penal número 2 de Castellón decidió aplazar ayer el juicio al presunto agresor de mujeres de Vila-real ante la falta de testigos citados a declarar. El acusado, de 30 años y nacionalidad rumana, se enfrenta a una pena de 12 años de prisión después de, presuntamente, intimidarlas y golpearlas para apropiarse de sus pertenencias y sus objetos de mayor valor. El señalamiento tendrá lugar el próximo martes 18 de octubre, tal como concretó la sala.

El procesado, junto a dos compatriotas más, fue arrestado después de causar una gran alarma social en Vila-real durante el año pasado. Hasta 11 personas sufrieron los asaltos de los supuestos ladrones, que fueron detenidos tras apalear a varias víctimas cuando se disponían a entrar en sus portales y poner en jaque a toda la localidad. Algunas de las vecinas afectadas, incluso, tuvieron que ser ingresadas en estado grave en varios hospitales. Es el caso de una mujer de 68 años, que llegó a sufrir una fractura de mandíbula. H