La autopsia realizada el lunes por la mañana a Ana M., la mujer hallada sin vida en su domicilio de Vinaròs el domingo por la tarde, ha concluido que la víctima tuvo una muerte violenta.

Según ha podido saber Mediterráneo de fuentes solventes, el cadáver de la fallecida presentaba diversos cortes en el tórax, que los médicos forenses descubrieron tras quitarle la ropa.

Se trataba de varias cuchilladas por arma blanca que, según los resultados del exhaustivo análisis practicado al cuerpo, causaron la muerte a la víctima. Por ello, la Guardia Civil centra sus investigaciones en el entorno de la fallecida y analiza los posibles móviles que pudieran tener sus allegados para acabar con su vida. La muerte accidental queda descartada tras descubrir la autopsia las incisiones mortales en el cuerpo de la mujer.

El domingo, sobre las 18.30 horas, los vecinos alertaban a los agentes de la Benemérita y a los bomberos de que salía humo de una de las viviendas del número 44 de la calle Centelles de Vinaròs. En concreto, de un piso de la segunda planta. Los efectivos entraron en la vivienda, comprobaron el estado del piso y, en el reconocimiento del inmueble, descubrieron el cuerpo de una mujer dentro de una de las habitaciones de la casa.

Los técnicos sanitarios confirmaron que había fallecido y, en un principio, se barajó la opción de que hubiera podido morir por inhalación de humo.

El cuerpo de Ana M. no estaba quemado y la estructura de la vivienda tampoco estaba dañada, según confirmaron a este periódico, por lo que la Guardia Civil comenzó a investigar el incipiente incendio declarado en el inmueble, al que rodeaban extrañas circunstancias.

Tras los resultados de la autopsia, los investigadores se centran ahora en determinar la autoría del ataque mortal. H