Fue fruto del destino y la casualidad que los castellonenses Samuel Fernández y Sergio Ausina decidieran a última hora cambiar la ruta de mountain bike que querían seguir el pasado lunes, día de Nochevieja, y se convirtieran en héroes por un día. Estos dos ciclistas del grupo Karagols Enduro MTB localizaron en la zona de Montornés (Benicàssim), en una senda de difícil acceso, a un anciano de 72 años, que los equipos de emergencias llevaban buscando más de 17 horas, después de que desapareciera de la residencia Oasis de Benicàssim, donde reside, y pasara la noche al raso.

“Como era Nochevieja decidimos acortar la ruta y fuímos hacia Montornés, vimos que sobrevolaba un helicóptero de emergencias e imaginamos que algo debía haber pasado. Al rato, vimos como al final de la senda había un señor sentado de espaldas y nos acercamos corriendo”, ha recordado Samuel Fernández. En ese momento, ambos ciclistas corrieron a socorrerle y vieron que tenía un golpe en la cabeza y estaba desorientado.

“No podía levantarse, temblaba y decía palabras sin sentido fruto del alzhéimer que padece”, ha apuntado Fernández, quien cree que el hombre pudo llegar hasta este lugar porque la senda desemboca en una calle asfaltada.

Tras localizarlo, llamaron de inmediato al 112, donde comunicaron el suceso y les informaron de que estaban buscando en esa misma zona a un señor desaparecido, que resultó ser José Ramón, el anciano al que acababan de encontrar.

Tanto Sergio como Samuel ayudaron a subir al anciano, que no podía caminar bien, hasta una carretera, donde ya recibió la asistencia de la Guardia Civil y la SAMU, que se desplazó hasta esta zona del Deserto de les Palmes.

VISITA // “Creemos que estará bien, así que habíamos pensado que dentro de unos días igual vamos a la residencia a visitarlo y saber que se recupera”, ha indicado Fernández, quien reconoce que dieron la bienvenida al año nuevo con una sonrisa, tras haber localizado a este hombre, “ya que quién sabe qué hubiera pasado si no llegamos a encontrarlo, ha sido una cosa increíble, porque desde el helicóptero era muy complicado dar con su paradero”.

En este sentido, este ciclista apunta la necesidad de que los equipos de emergencias pidan colaboración a aquellos que conocen de cerca el terreno, como son los bikers. “Ni los vecinos de Montornés que se movilizaron conocían la senda donde lo encontramos”.