El Tribunal Supremo eleva de cuatro y medio a siete años de prisión la condena impuesta a un vecino de Altura, de 50 años, por abusos sexuales a su hijastra cuando esta tenía 11 años. El alto tribunal ha estimado el recurso interpuesto por la Fiscalía a la sentencia de la Sección Primera de la Audiencia Provincial del 2016 en el que solicitaba una condena de cárcel mayor para el hombre.

La defensa también recurrió el fallo, pero el Supremo lo ha rechazado, incrementando en dos años y medio la pena de prisión impuesta en la capital de la Plana. La segunda sentencia mantiene la prohibición de aproximación y comunicación con la afectada durante cinco años y no establece indemnización, ya que la adolescente renunció a ella.

DOS CASOS DE ABUSOS

El doblemente condenado practicó tocamientos a la hija de su pareja en los pechos y los genitales.

La niña, con una infancia muy complicada, ya había sido víctima de abusos sexuales en su Colombia natal. «Cuando mi madre no estaba, él me tocaba. Yo estaba haciendo los deberes o fregando los platos, se colocaba detrás de mí y me acariciaba por encima de la ropa y por debajo de ella», relató la menor durante el juicio en la Audiencia Provincial.

El hombre, por su parte, negó durante la vista oral haber abusado de la adolescente y afirmó que todo era «una falacia» de la chica y de la madre de esta para destrozarle la vida, después de «haberlas mantenido y criado durante muchos años». Los jueces consideraron «creíble» y «coherente» el testimonio de la víctima en las seis declaraciones que prestó durante el desarrollo del proceso.

La joven renunció en el juicio a la indemnización económica que pudiera corresponderle y admitió que había algunas ocasiones en que los tocamientos le «gustaban», una afirmación que, según los forenses, dotaba de credibilidad a la historia relatada.

«SE ME VINO EL MUNDO ABAJO»

La exesposa del acusado, con la que tiene otros dos hijos, relató que tras 14 años juntos se enteró de lo que había pasado. «El mundo se me vino abajo. Él me lo admitió en una discusión y me dijo que no iba a volver a pasar», explicó la mujer en referencia a una grabación que hizo a su expareja sin que él se diera cuenta.

La hermana de la afectada dijo haber presenciado en una ocasión una escena de abusos. «Vi que mi hermana se estaba lavando los dientes y que él la cogía por detrás y le tocaba el pecho», dijo.

La hermana de la víctima también presentó en su día una denuncia contra su padrastro por supuestos abusos cometidos años atrás, aunque la misma se archivó por prescripción de hechos.