El juez del juzgado de Menores de Castellón, Rafael Sánchez-Tinajero, ha condenado a tres menores de edad a la medida de amonestación y a dos de ellos al pago de cerca de 9.000 euros cada uno por disparar con una escopeta de perdigones desde una ventana de la avenida Espronceda de Castellón a los viandantes, llegando a herir a tres personas.

La sentencia, a la que ha tenido acceso Mediterráneo, ha sido confirmada en su integridad por los magistrados de la Sección Primera de la Audiencia de Castellón --Carlos Domínguez, Pedro Garrido y Aurora de Diego--. Los tres niños --sus padres como tutores--, además, deberán de abonar también las costas procesales.

Según reza la sentencia, los hechos se produjeron en el 2010, cuando los tres chavales, de 14 años (entonces), puestos de acuerdo y con la intención de menoscabar la integridad de las personas, desde una ventana de la calle Espronceda de Castellón efectuaron diversos disparos con la escopeta de aire comprimido, alcanzando a diversas personas que circulaban por la vía publica en diferentes fechas. Así, en primer lugar, el día 7 de septiembre, sobre las 14.00 horas dispararon contra la primera de las víctimas, un hombre que paseaba por la acera, a la altura del número 17 de dicha calle. Como consecuencia, este sufrió lesiones consistentes en lesión en área submaxilar de 0,5 milímetros de diámetro.

BALINES // Del mismo modo, desde el mismo lugar, los menores, el día 9 de septiembre del 2010, dispararon contra una mujer que se encontraba a la altura del número 17 y 19 de esa calle, causándole daños consistentes en lesión penetrante en antebrazo derecho afectando a fascias musculares en bíceps con formación de granuloma a unos dos centímetros de profundidad, que para su total sanidad precisó de tratamiento médico consistente en extracción del balín, cierre y puntos de sutura, tardando en curar 129 días, 69 de los cuales fueron impeditivos, persistiendo como secuelas una cicatriz en el brazo derecho de más de tres centímetros y algias en músculo de brazo derecho.

Igualmente también quedó probado durante el juicio que los chavales, desde una azotea del edificio de la avenida Espronceda número 4 de Castellón, efectuaron diversos disparos con la misma pistola, el 21 de septiembre del año 2010, alcanzando a otra mujer en su rodilla y causándole lesiones consistentes en erosiones y hematoma en cara anterior de la rodilla derecha que precisaron de asistencia sanitaria urgente. H