La Guardia Civil y la Agencia Tributaria detuvieron ayer a dos hombres españoles e investigan a otro de origen italiano por intentar, supuestamente, introducir cocaína en España en bananas falsas y cajas de cartón a través de las ciudades de Valencia y Málaga.

La operación, denominada Esplit, fue desarrollada por el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga de la Guardia Civil de la Comandancia de Valencia y por el Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, según informó el Ministerio del Interior en un comunicado.

La misma se inició el pasado mes de noviembre del 2016, cuando se localizó una partida legal de bananas procedentes de Sudamérica, entre las que había 57 unidades «simuladas», hechas con resina, que servían para ocultar cerca de siete kilos de cocaína, según los resultados positivos de las pruebas de narcótico.

OTROS 10 KILOS // Posteriormente, se procedió a la incautación de otros 10 kilos de la misma droga en diversas láminas disimuladas en las solapas de cajas de cartón que contenían bananas reales.

En las investigaciones, que llevaron varios meses de trabajo a los agentes, fueron detenidos dos varones de 37 y 57 años de nacionalidad española. Además, se investiga a otro de 56 años de origen italiano debido a la sospecha de que también pudiera tener un papel clave en la operación. A todos ellos, la Benemérita les considera presuntos autores de un delito de tráfico de drogas y otro de pertenencia a organización criminal.

Los agentes realizaron también tres registros en Málaga. Las diligencias han pasado a disposición del Juzgado de Instrucción número 6 de esa localidad.

MÉTODO CONOCIDO // La entrada de cocaína a través de cargamentos de bananas no es un método desconocido para la Guardia Civil. No obstante, la última operación de estas características se remonta a octubre del 2014, cuando la Benemérita desarticuló otra red de narcotráfico y detuvo a nueve personas. De ellas, cuatro eran españolas y cinco de otras nacionalidades, mientras que la cantidad de droga intervenida ascendió a 54 kilos, todos ellos procedentes de Colombia.

En enero del mismo año, otro operativo permitió incautar hasta 227 kilos de cocaína pura procedente de Equador. En aquella ocasión, se detectó en el puerto de Algeciras un contenedor sospechoso y, tras su apertura, se encontraron cinco bolsas de deporte que contenían bananas llenas de droga. Con las nuevas detenciones se demuestra que los narcotraficantes han recuperado esta técnica de entrada.