El hombre acusado de atropellar a un vigilante de seguridad de un club de alterne de Orpesa declaró ayer en la Audiencia Provincial, durante el juicio por intento de homicidio, que “no vio” al afectado. Además, insistió en que “no se dio cuenta de haberle arrollado con su vehículo”.

Durante la vista oral, varios testigos declararon en la sala de la Sección Segunda. Uno de ellos indicó que el procesado y otra persona que le acompañaba “iban colocados” y concretó que tras el suceso se incorporaron a la N-340 en dirección a Tarragona.

Según el Ministerio Público, los hechos ocurrieron sobre las 2.30 horas de la madrugada del 9 de mayo del 2004. En el interior del club de alterne, ubicado cerca de la N-340, en Orpesa, se encontraba el acusado, quien, como consecuencia de su mal comportamiento, fue invitado a abandonar el establecimiento. Ante este hecho espetó al vigilante: “A ti, rumano de mierda, te vamos a matar, vamos a por unas escopetas, espérate aquí y en cinco minutos venimos y te matamos”. Tras esto, salió del local y se subió a su coche. Cuando parecía que se incorporaba al carril, giró, lo encaró hacia el club y aceleró, arrollando al vigilante que estaba en la puerta, así como a otro hombre, que esquivó la embestida, pero el primero no. El fiscal pide tres años de cárcel. H