Un ciudadano alemán, de 73 años, falleció a primera hora de la tarde de ayer en la cala Pebret de Peñíscola, situada en la Serra d’Irta. El hombre, que se estaba bañando junto a su esposa, sufrió los efectos de las corrientes marinas, habituales en este punto costero. El matrimonio estaba disfrutando del mar cuando empezaron a alejarse de la orilla y tener problemas para regresar.

El hombre hizo un esfuerzo para rescatar a la mujer, pero él no pudo salir de la corriente. Otros bañistas que se encontraban en ese momento en la cala se percataron de la situación y fueron a socorrerlos. Ella pudo salir del agua, pero su marido ya estaba inmóvil cuando se acercaron a él. De inmediato se avisó a los servicios de emergencia. Hasta el lugar de los hechos se desplazaron dos ambulancias y una unidad del Samu. También efectivos de la Guardia Civil y la Policía Local. Incluso se acercó un helicóptero medicalizado de la Generalitat, por si fuera necesario su traslado inmediato a un centro hospitalario. Los efectivos médicos desplazados hasta la cala trataron de reanimar al hombre durante más de cuarenta minutos, de manera infructuosa, por lo que tuvieron que certificar su muerte sobre las cuatro y media de la tarde.

Más tarde se procedió al levantamiento del cadáver, tras el reconocimiento de los forenses.

El fallecido y su esposa residían en Alemania, aunque conocían bien Peñíscola, ya que eran propietarios de una segunda residencia en una de las urbanizaciones del municipio. Las calas de la Serra d’Irta son uno de los grandes atractivos de Peñíscola, al estar ubicadas en una zona sin construcciones. A pesar del creciente número de personas que acuden allí cada año, no cuentan con servicio de socorrismo.

Algo que está explicado tanto en la página web turística del municipio como en los carteles situados a pie de playa. Desde hace tiempo, hay personas que piden la presencia de socorristas en la zona más visitada por los bañistas. Este verano se han producido otros rescates en Irta. H