La Fiscalía pedirá más de 70 años de prisión para J.A.M.M., el policía local de Burriana que fue detenido el pasado año, acusado de los supuestos delitos de corrupción, prostitución y abusos sexuales a diversos menores.

Así ha podido saberlo este diario de fuentes solventes, que revelaron que el juicio oral por estos hechos podría celebrarse antes de que acabe el 2015. Aunque todavía no hay una fecha señalada en el calendario y el escrito de acusación provisional contra el efectivo de policía no ha sido presentado aún por el Ministerio Público, la Fiscalía solicitará una elevada pena de cárcel por el gran número de menores afectados por los abusos, hasta 12, y la gravedad de los mismos.

Tras la detención del procesado a manos de la Guardia Civil, el 8 de abril del 2014, el Juzgado de Instrucción número 6 de Castellón dictó un auto de ingreso en la cárcel, provisional, comunicada y sin fianza para el agente. El hombre continúa, un año después, en prisión preventiva a la espera de que se celebre el juicio.

El policía local fue arrestado tras descubrirse que, presuntamente, prevaliéndose de su condición de autoridad, se había ganado la confianza de los menores afectados para acercarse a ellos con diversos fines sexuales.

Después de ser arrestado un martes, fue trasladado a la comandancia de la Guardia Civil de Castellón y no fue hasta el jueves por la noche cuando pasó a disposición judicial. Tras prestar declaración durante varias horas ante el magistrado, este decretó su ingreso en prisión provisional, a tenor de las contundentes pruebas que la Benemérita presentó en su contra tras el operativo.

El policía, natural de Castellón, prestaba sus servicios en Burriana desde el 2003. La investigación comenzó diez años después, cuando la Guardia Civil recibió una denuncia alertando de que un agente de la Policía Local estaba, presuntamente, aprovechándose de su condición para poder abusar sexualmente de menores.

Inmediatamente, la Benemérita comenzó a realizar vigilancias y seguimientos al agente, hasta que la actuación culminó con su detención siete meses después.

Tal y como reveló este diario en su día, una de las hipótesis que se investigan es la de que el acusado pudiera haber contactado con los adolescentes a través de las bases de datos a las que tenía acceso por su actividad como agente. Al parecer, J.A.M.M. habría pedido a los menores imágenes de alto contenido sexual y, más tarde, habría abusado, presuntamente, de cerca de una docena de ellos. H