La actividad rutinaria que se vive cada mañana en el colegio Jaime Sanz de Peñíscola se vio ensombrecida ayer por un atropello con el resultado de dos personas, una madre y su hija de 10 años, heridas. Ambas estaban caminando en el descampado situado junto al centro escolar, con acceso en la calle Marjals, cuando un vehículo que se disponía a aparcar las arrolló.

Debido al impacto, la menor quedó atrapada debajo del automóvil, mientras que la madre sufrió de lleno el impacto. Efectivos del parque de bomberos de Benicarló fueron movilizados para levantar el coche y excarcelar a la niña, aunque finalmente no fue necesaria su intervención, ya que gracias a la colaboración de la gente que llevaba a sus hijos al centro, a los agentes de la Policía Local y la ayuda prestada por un taller del municipio pudieron levantar el vehículo usando elementos como gatos mecánicos.

Tras ser liberada, la menor fue llevada a una ambulancia, donde se hizo una primera exploración de su estado. Presentaba un cuadro de policontusiones y un traumatismo en el brazo.

En cuanto a la madre, de 44 años, sufrió una rotura de pelvis y fractura en las dos piernas. La mujer fue trasladada en un helicóptero medicalizado hasta el Hospital General de Castellón, donde le realizaron una intervención quirúrgica de urgencia.

La hija, en cambio, fue llevada primero con una unidad del SAMU al Hospital de Vinaròs, para, posteriormente, ser desplazada hasta Castellón. Las dos heridas forman parte de una familia muy conocida de Peñíscola. La niña fue el año pasado dama infantil de las fiestas de la localidad.

Al conductor, de origen marroquí, se le practicaron pruebas de alcoholemia y estupefacientes, con resultado negativo.

FATAL DESPISTE //

Según el informe de la Policía Local, se apunta a que la causa podría ser un fatal despiste, al apretar el pedal del acelerador en lugar del freno al ver a la niña. La Policía Local estuvo en todo momento en el lugar auxiliando a las heridas.

Los hechos ocurrieron a las 8.45 horas. Una madre explicó que «salía el autobús de un viaje de los alumnos de sexto hacia Madrid, en el que iba el hermano de la niña; cuando ya se habían despedido, madre e hija fueron a por las cosas de la alumna al coche para entrar ya en el colegio». Fue en ese instante cuando ocurrió el incidente, que llenó de tristeza a los padres y familiares que a esas horas dejan a sus pequeños en el centro escolar.

En los últimos meses ha habido dos atropellos mortales en la provincia. En abril hubo uno a un niño de 13 años en Burriana y otro a principios de este mes a una mujer de Vila-real de 62 años que cruzaba la calle. //