Los apenas 1.500 habitantes de Traiguera no dan crédito a lo ocurrido en la pequeña sucursal de Bankia del municipio. Durante años, las cuentas bancarias de los vecinos de la localidad han sido objeto de múltiples irregularidades, cometidas, presuntamente, a manos del que fuera director de la oficina, Juan Vicente Cervera.

El responsable de la sucursal durante más de 20 años, un popular vecino de 54 años, fue despedido a finales del 2014 tras detectarse algunos movimientos sospechosos en la actividad de la entidad local, según ha confirmado Bankia a este periódico.

Al parecer, haciéndose valer de la relación de confianza que mantenía con los clientes, habría provocado un agujero de en torno a dos millones de euros entre las cuentas de todos los afectados, según calculan las víctimas.

El responsable de Bankia en Traiguera habría vendido una gran cantidad de preferentes entre los vecinos, sin ser estos conscientes del producto que estaban adquiriendo. Una vez descubierta esta venta masiva, con la que habría pretendido lucrarse, los afectados pidieron explicaciones al director de la entidad.

Este, con el objetivo de devolver el dinero a los preferentistas, comenzó a desviar cantidades de otras cuentas para retornar el dinero perdido por las preferentes.

Pronto, los números comenzaron a no cuadrar. Según explican fuentes de la propia Bankia, algunos vecinos se quedaron sin sus ahorros y otros los vieron incrementados. Según las víctimas, se dieron cuenta de que el exdirector de la oficina del carrer Major habría pedido préstamos a nombre de diversos vecinos sin su autorización, se habría apropiado de dinero y también habría ocultado toda la información.

El presunto responsable de esta estafa masiva fue cesado “en cuanto hubo conocimiento de sus malas prácticas”, cuando Bankia comenzó a recibir denuncias y reclamaciones de los vecinos de Traiguera. Según ha podido saber Mediterráneo, aunque la entidad ya lo despidió el pasado año, estudia ahora qué medidas legales tomar contra su exempleado.

La entidad no ha confirmado que el agujero investigado en cuentas personales de la localidad sea de dos millones de euros, pues señala que cada expediente se mira “de forma individualizada”. El caso se está llevando, por el momento, por la vía de lo Civil. La justicia deberá determinar ahora qué pasó exactamente en la sucursal de Bankia de Traiguera, en la que el dinero desapareció. H