El brasileño de 32 años que fue detenido por apuñalar en tres ocasiones a la joven de Vila-real Claudia A.A. en su domicilio de Ibiza dijo ante el juez que instruye el caso que se le fue “la cabeza” durante la agresión. Además, el acusado, que reconoció los hechos parcialmente, aseguró no recordar bien lo sucedido en el inmueble de la urbanización Sa Calma y manifestó sentirse muy confuso en su declaración en sede judicial en la isla pitiusa.

El magistrado decretó su ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza, tal y como adelantó ayer Mediterráneo, después de que los agentes de la Guardia Civil lo detuvieran cuando intentaba huir a Valencia en barco.

Por su parte, Claudia A.A. sigue ingresada en el hospital Can Misses de Ibiza, recuperándose de sus heridas, tras haber sido operada un día después de su ingreso.

Según ha podido saber este diario, las lesiones no revisten gravedad y la vida de la chica no ha corrido peligro al tratarse el arma con la que la atacaron de una navaja de pequeñas dimensiones.

La joven, natural de Vila-real y residente en la actualidad en Ibiza, trabaja como auxiliar de fisioterapia en la Policlínica Nuestra Señora del Rosario desde hace menos de un mes. Su familia se encuentra muy unida a la isla, en donde han regentado una tienda de ropa y complementos desde hace algunos años.

Desde entonces, viven a caballo entre Vila-real y la isla pitiusa.

Los amigos de la infancia, compañeros del colegio Nuestra Señora de la Consolación de Vila-real, en el que la afectada estudió, y los vecinos de la localidad se encuentran en shock por lo sucedido.

“Nos hemos enterado por el periódico de lo que le ha pasado a Claudia. Es increíble que alguien pueda hacer una cosa así”, relataron algunos a este rotativo, mientras otros allegados reconocieron que la noticia había corrido como la pólvora en Vila-real.

Durante la tarde de ayer, la afectada publicó unas fotos del regalo que una amiga le había enviado para darle ánimo desde la provincia. En cuatro emotivas líneas agradecía el cariño recibido, dejando ver la cama del hospital y una de sus manos. H