La N-340 se cobró ayer una nueva víctima mortal. En esta ocasión fue una mujer de nacionalidad irlandesa la que perdió la vida tras chocar la motocicleta en la que viajaba con un turismo en el término municipal de Benicarló.

El Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU) recibió un aviso sobre el siniestro a las 0.50 horas de la madrugada del viernes al sábado en el que se alertaba de una colisión en el kilómetro 1.037 de la citada vía, en el trazado antiguo que une las localidades de Benicarló y Vinaròs. Cuando llegaron los servicios sanitarios al lugar de los hechos la mujer, de 23 años, ya había fallecido. En la colisión también resultó herido un varón de 31 años y de la misma nacionalidad que fue trasladado en una SAMU al Hospital Comarcal de Vinaròs con politraumatismos.

La Guardia Civil de Tráfico aún investiga las causas del accidente, que se produjo en una zona donde el tráfico rodado se ha reducido en los últimos tres años tras la apertura de una variante.

Pero esta solución no ha mejorado de forma sustancial la seguridad en la vía. En el último informe Eurorap, elaborado a nivel continental para evaluar la peligrosidad de la red viaria y en el que participa el Real Automóvil Club de España, aún cataloga la carretera como de riesgo medio-alto. En los dos últimos meses ha registrado dos accidentes mortales en los que han muerto dos vecinos de Vinaròs y Sagunt.