Avanza la instrucción del caso Maikel. Esta próxima semana la juez del juzgado de Instrucción número 2 de Castellón María Victoria García Alós, ha citado a declarar a tres amigos de los asesinos confesos. Especialmente, destaca uno de ellos: un chico de 17 años, que cumple en estos momentos condena en un centro de menores de Valencia, que se citó con dos de los detenidos (de 14 y 17 años) poco antes del crimen. Su testimonio es clave, ya que la juez trata de averiguar si hay más personas implicadas en este brutal asesinato y si, como se sospecha, todo fue producto de un macabro y sangriento plan.

Las fechas de las citaciones no han trascendido, ya que la magistrada ha ampliado el secreto de sumario de todas las actuaciones durante un mes más, pero se sabe que los tres chavales acudirán durante esta semana y en días diferentes a la sala del juzgado de Instrucción 2 de Castellón, en principio, en calidad de testigos.

CONMOCIÓN SOCIAL // Cabe recordar que Miguel Navarro, hijo del boxeador castellonense El Colorín, desapareció la noche de Reyes, 6 de enero. Su familia, al ver que no había regresado a casa, en el grupo San Lorenzo, puso una denuncia en la comisaría de la Policía Nacional. Temiéndose lo peor, comenzaron a empapelar la ciudad con carteles y se pusieron en contacto con los medios de comunicación para alertar de su extraña desaparición.

La Policía Nacional inició una investigación y el 12 de enero detenía a los dos menores de 17 y 14 años y a otro chaval, de 20. El cadáver de Maikel fue localizado alrededor de las 19.00 horas, en un huerto de naranjos cerca de la basílica de Lledó, delante del chalet donde los tres asesinos confesos acabaron con la vida del castellonense asestándole, como confirmó la autopsia, siete hachazos en la cabeza y dos en las manos, cuando intentaba protegerse. Los tres jóvenes, como narraron a la juez, ataron el cuerpo y lo llevaron desde la casa al huerto con una carretilla. Una vez allí, lo enterraron. Después, llegaron a confesar, limpiaron la sangre de la casa con salfumán y se deshicieron del teléfono de Maikel.

Los investigadores analizan los whatsapps que se intercambiaron los autores confesos y los tres testigos que declararán esta semana antes y después del crimen. El detenido de 20 años está en la cárcel de Castellón y los dos menores siguen en dos centros de Valencia y Alicante donde no pueden, aún, recibir visitas.