Cerca de 80 personas han marchado este miércoles por las calles de Castellón al grito de "Justicia" por Rocío Bustamante, la castellonense de 29 años muerta en 2017 en un accidente de tráfico provocado, presuntamente, por un conductor ebrio. El presunto autor dio 0,37 mg/l.

Familiares y amigos de la mujer --con dos hijos huérfanos-- han pedido prisión preventiva para el joven de 19 años que colisionó brutalmente contra el coche en el que viajaba la víctima con su hija de seis años. El hombre invadió el carril contrario en la CV-17, en el término de Castellón, y embistió mortalmente a Rocío. La hija de esta también resultó herida grave en la colisión.

"Queremos Justicia y que la muerte de Rocío se juzgue como toca", repetían ayer sus allegados. "Esa persona está en la calle y Rocío está muerta. No es justo", explicaron otros a este diario.

La causa está abierta por una imprudencia grave con resultado de muerte.