Todo ocurrió muy deprisa. Un estanquero del Grao de Castellón vivió la experiencia más amarga de su vida cuando fue sorprendido al salir de su casa por dos individuos que le obligaron, encañonándolo con una pistola, a volver a entrar en su vivienda y entregarle todo el dinero.

Tras huir, los ladrones le dejaron maniatado, atado de pies y manos con cinta aislante a una cama de una habitación. “Salgo de mi casa y me encuentro con dos hombres que me cogen de los hombros, me apuntan con una pistola y me instan a volver a entrar para que les diera todo el dinero que tuviera; gritaban ¡caja fuerte, caja fuerte!, iban tapados con un casco y con guantes y eran rumanos”, relata.

“Les dije que no tenía caja fuerte, por lo que les di todo el dinero que, en ese momento, llevaba, mil euros en el bolsillo y tres mil en un maletín”, detalla.

El estanquero, que es también abogado, si bien apunta que los asaltantes “eran profesionales”, descarta que fueran a por él ex profeso. “Simplemente querían robar en una casa”, aseguró. Tras desprenderse de la cinta aislante con la que estaba retenido, “y hacerme mucho daño en los brazos”, llamó a la policía para denunciar los hechos. Fuentes del Cuerpo Nacional de Policía señalaron ayer que “se están investigando los hechos”. H