La mujer cuyo cadáver fue encontrado el martes por la tarde en el embalse de Arbón, la gijonesa de 43 años que llevaba desaparecida desde el 13 de febrero, murió de forma violenta, informaron ayer fuentes de la Guardia Civil.

La autopsia realizada en el Instituto de Medicina Legal de Oviedo determinó que la mujer, María Paz Fernández Borrego, tuvo una «muerte violenta», señalaron dichas fuentes, que eludieron dar detalles al estar la investigación bajo secreto de sumario dictado por el juzgado de Luarca. Las fuentes añadieron que, una vez constatada la muerte violenta, «la investigación tiene que hacer su trabajo».

El cadáver fue encontrado en una zona de difícil acceso en una orilla del embalse, en las proximidades de un cámping. El Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil pudo rescatar el cuerpo horas después, tras lo cual fue trasladado al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), en Oviedo, para su estudio radiográfico y posteriormente al instituto anatómico forense de para la correspondiente autopsia.

El cuerpo pudo ser identificado por el cabello, la ropa y el tatuaje que tenía grabado en un hombro. A Mª Paz se le perdió la pista el 13 de febrero en la localidad de Navia.