La Audiencia Provincial sentará en el banquillo de los acusados el próximo 18 de mayo a un hombre que sufre esquizofrenia y que, presuntamente, abusó de una menor de edad en la zona del Salto de la Novia de Navajas en el mes de julio del 2016.
No era la primera vez que cometía un supuesto delito de tipo sexual. Le constan tres condenas --de 1998 y 2000-- previas. La Fiscalía pide ahora para él 15 años de internamiento en un centro psiquiátrico, ya que cuenta con una alteración psíquica que supone una circunstancia eximente completa para él.
Además, el Ministerio Público aboga por que el hombre indemnice a la menor a la que realizó tocamientos con la cantidad de 15.000 euros por los daños morales derivados de los presuntos abusos sexuales --la pequeña sufre sintomatología depresiva--.
LOS HECHOS
Los hechos sucedieron el día 11 de julio del 2016, sobre las 8.00 horas. La víctima estaba disfrutando de un campamento de verano y se encontraba en el paraje natural en compañía de otros niños. El procesado deambulaba por el camino de acceso y, al observar la presencia de tres niñas, se detuvo, las miró y se aproximó a donde estaban.
Según el relato del fiscal, el adulto rodeó la roca tras la que se ocultaban las menores para orinar y, aprovechando que la afectada se encontraba agachada y con los pantalones bajados, la cogió por la espalda. Con ánimo de obtener satisfacción sexual, le levantó la camiseta y, según la acusación, le tocó los pechos, las nalgas y la zona vaginal. La pequeña intentó resistirse, iniciándose entre ambos un forcejeo. El acusado llegó a bajarse los pantalones con la intención, según sus propias palabras, de «follar».
En ese preciso instante las otras dos niñas que habían acudido con la afectada a orinar acudieron en auxilio de la víctima y, tras recriminar al procesado la situación, este soltó a la menor y huyó del lugar, según sostiene el Ministerio Fiscal en su escrito.
El hombre sufre esquizofrenia simple y un trastorno esquizotípico de la personalidad de largos años de duración. En el momento de los hechos presentaba una psicopatía compatible con una descompensación psicótica, en la que predominan las incoherencias y distorsión del pensamiento con alucinaciones auditivas.
Por todo ello, la Fiscalía sostiene que en el momento de la agresión «no podía comprender la ilicitud de los hechos por tener anuladas sus capacidades cognitivas y volitivas». Así, solicita para el presunto agresor la medida de seguridad de internamiento por tiempo no superior a 15 años, así como otros 10 años de libertad vigilada y la prohibición de acercarse a menos de 500 metros de la menor por el mismo tiempo. El procesado, que está en prisión provisional, deberá sentarse en el banquillo el día 18.
