Las peores previsiones se han cumplido y el fuego del incendio que azota desde el lunes a una parte de la Serra d’Espadà rebrotó con fuerza ayer en el barranco de Aín, cerca de la partida de les Clotxes de Tales. También se reprodujeron las llamas, ya a última hora del jueves, en el barranco de la Gerra de Onda, donde las avionetas comenzaron a actuar a las 7.15 horas y fueron descargando agua durante todo el día de ayer.

La condiciones de altas temperaturas, humedad y viento favorecieron la aparición de estos focos, como ya se avisó desde el puesto de mando avanzado.

En Tales dos brigadistas sufrieron sendos golpes de calor y tuvieron que ser trasladados al centro de salud de Onda. El primero pertenece a las brigadas de Montán. La segunda brigadista es de Villahermosa del Río y se encontró mal poco antes de las 20.00 horas de ayer, por lo que llegó una ambulancia de Onda a la urbanización Falda Montí de Tales para atenderla. Sus compañeros la ayudaron a bajar desde el monte hasta la pista forestal.

Según informó el Consorcio, en el rebrote de Tales intervinieron tres dotaciones de bomberos, seis unidades de bomberos forestales, tres aviones AirTractor, cuatro helicópteros y dos coordinadores.

Bomberos voluntarios del parque Espadán Mijares, con sede en Onda, se habían marchado ayer por la mañana y tuvieron que regresar. Los medios aéreos apuraron ayer más de los normal y comenzaron a retirarse poco antes de las 21.30 horas. Minutos después, el Consorcio informaba de que ya no quedaba nada de fuego en el perímetro de la reproducción. No obstante, siguieron enfriando la zona quemada.

GRAN PÉRDIDA // El alcalde de Tales, Vicente Juan Prades Ramos, acudió a la urbanización Falda Montí poco después de iniciarse el rebrote del fuego. Uno de los coordinadores de los bomberos le confirmó que la reproducción había sido nuevamente en el barranco de Aín, El munícipe permaneció en la zona pendiente de los avisos que le llegaban por el teléfono móvil. “Ha sido una gran pérdida para Tales y la Serra d’Espadà. Esperamos que no se vuelva a reproducir el fuego aunque estamos en días de mucho riesgo”, señaló el primer edil. “Quiero dar las gracias en nombre de Tales a todas las personas que ponen en peligro su vida para que el fuego no avance más y evitaron que el desastre fuera más grande”, indicó Prades.

Margarita Llorente vive en la urbanización Falda del Montí y es propietaria de un terreno de 12.000 metros cuadrados de olivos en Aín. “Creemos que se habrá quemado, pero todavía no hemos podido ir a verlo. Está muy cultivado y limpio, quizás sirvió para parar la fuerza del fuego”, comentó a Mediterráneo. H