La Audiencia Provincial de Castellón ha ordenado reabrir la investigación por la muerte de un bebé, que falleció por asfixia durante el parto en el Hospital La Plana en el año 2009. El Juzgado de Instrucción número 1 de Vila-real había ordenado el sobreseimiento provisional de la causa, pero el máximo órgano judicial de la provincia ha estimado el recurso presentado por los padres y ha nombrado a un tercer perito para ahondar en las causas de la muerte del feto.

Según explica el auto judicial al que ha tenido acceso Mediterráneo, el bebé murió en el interior del seno materno. Según detalla la Sección Segunda, presentaba enrollamiento al cuello del cordón umbilical. Además, el mismo era muy corto --22 centímetros-- y, tal y como indica el informe forense, cuando el cordón mide menos de 30 puede complicar que el niño pueda bajar por el canal de parto. Los doctores consideran que la «persistente pero errónea praxis médica para conseguir el nacimiento por vía vaginal mediante maniobras obstétricas contundentes en condiciones inadecuadas causó la muerte».

Los facultativos aplicaron, en última instancia, una ventosa sobre la cabeza fetal, estando el bebé en el plano 2 de Hogde --incumpliendo una de las supuestas condiciones necesarias para su aplicación --. Uno de los informes a los que se refiere el auto considera que una cesárea a su debido tiempo hubiera evitado el fallecimiento del neonato.

Según el relato del informe médico-forense, el embarazo fue de evolución normal y sin anomalías fetales. El periodo de dilatación materna transcurrió sin incidencias y en el registro cardiotográfico inicial del bebé y las contracciones uterinas no se observaron alteraciones sospechosas de pérdida de bienestar fetal.

PRESUNTAS OMISIONES

La acusación particular considera que hubo omisiones por parte de los facultativos tanto en el control del embarazo, como en relación a la diabetes gestacional que podía presentar la madre, así como en el hecho de venir el feto con un cordón extremadamente corto.

El magistrado ponente de la Audiencia cree que existen «elementos incriminatorios que exigen ya el depuramiento de los hechos». No obstante, considera conveniente clarificar pericialmente algunas cuestiones médicas. Entre ellas, el juez solicita aclarar si debieron evaluarse y dejar constancia de las características del cordón, si debieron reflejarse las vueltas de cordón al cuello del neonato, si el registro cardiográfico fue vigilado de forma correcta y en qué plano posicional del bebé se aplicó la ventosa. La Audiencia devuelve ahora el caso al juzgado de Instrucción que debe seguir la investigación.