La Audiencia Provincial de Castellón ha sentenciado a seis años y cuatro meses de prisión a un vecino de Nules, de 51 años, por agredir sexualmente a una mujer mientras la llevaba en coche a casa tras una noche de fiesta. El ya condenado deberá indemnizar a la joven en casi 35.000 euros por las lesiones y daños morales sufridos el 6 de agosto del 2016.

Agresor y víctima coincidieron esa noche en un pub de Nules y, tras entablar conversación, decidieron marcharse a otro local de ocio nocturno de Moncofa.

En el segundo establecimiento se tomaron cada uno dos cervezas y decidieron regresar a Nules en el vehículo de él. Durante el trayecto, el acusado le dijo a la afectada que irían por el camino de la playa, haciéndole creer que era para evitar un posible control de alcoholemia, según declara probado la sentencia. En un momento determinado, el hombre detuvo el vehículo en una zona deshabitada y, tras levantar la falda a su acompañante, empezó a tocarle la pierna. La chica le dijo que no quería nada con él y que la dejase, bajándose del vehículo. Sin embargo, el varón también se apeó y se abalanzó sobre ella.

Los magistrados de la Sección Primera consideran probado que la tiró con fuerza contra el capó y, mientras la presionaba con una de sus manos en el pecho para que no se moviera, con la otra le quitó la ropa interior y le lamió los genitales, resistiéndose la perjudicada, quien gritaba e intentaba zafarse sin conseguirlo.

Seguidamente, el procesado, con idénticos fines libidinosos, introdujo en repetidas ocasiones varios de sus dedos --sin poder precisar cuántos de ellos-- en la vagina de la mujer, causándole lesiones. Tras agarrarla nuevamente con fuerza intentó colocarla boca abajo, no consiguiéndolo al resistirse la perjudicada.

Finalmente, el condenado «aproximó su miembro viril a las partes íntimas de la chica con la intención de penetrarla, no lográndolo», determinan.

LESIONES Y DAÑO PSÍQUICO

La víctima sufrió hematomas en antebrazos y brazos, erosiones en los muslos y una escoriación en sus partes íntimas --lesión esta última que precisó de tratamiento por enfermería con clorhexidina como antiséptico--. Además, la víctima tuvo lesiones psíquicas consistentes en un trastorno depresivo reactivo, por lo que requirió un tratamiento médico-psicofarmacológico por parte de su médico del centro de salud.

Posteriormente, la mujer sufrió nuevos síntomas, diagnosticados como «depresión neurótica», por lo que necesitó tratamiento médico-psicológico en el Centro Mujer 24 horas de Castellón, según reza el documento judicial.

El hombre no podrá acercarse a menos de 500 metros de la víctima durante los diez años posteriores a su salida de prisión, según establece la sentencia de la Sección Primera.