Una soldado del Ejército del Aire del cuartel de Bobadilla (Antequera, Málaga) ha denunciado haber sido drogada y violada por varios compañeros suyos en las propias dependencias militares tras una fiesta con otros compañeros con motivo de la celebración de la Virgen de Loreto. Los hechos habrían sucedido el pasado 10 de diciembre, según avanzó ayer el programa Espejo público de Antena 3. El Ministerio de Defensa informó de que se han abierto diligencias en el Juzgado Militar Territorial de Sevilla.

El día que sucedieron los hechos denunciados, la soldado explica que fue «a tomar unas cervezas con varios compañeros y le introdujeron unas sustancias en su bebida», y que «varios compañeros la rodearon y empezaron a meterle mano». La soldado víctima de la Manada militar ha presentado tres denuncias distintas a medida que, según relata, ha ido recordando lo sucedido. Según las mismas fuentes, en la primera declaración, denuncia haber sido drogada y violada: «La cerveza tenía un sabor amargo, pero en ese momento no le di importancia». La joven militar advierte en una denuncia que uno de los militares que señala le solía advertir: «Un día te tengo que echar burundanga». Una prueba positiva de barbitúricos, realizada al día siguiente, lo confirmaría ya que dio positivo en un test sobre sustancias de abuso con efectos propios de la burundanga.

En la segunda, aproximadamente diez días después, la mujer recuerda haberse sentido «como un cacho de carne». Ya en la tercera declaración cree acordarse de que «la habitación estaba a oscuras y la segunda persona era más grande que la anterior».

La joven también afirmó, según recoge ElPlural.com, que a medida que pasan los días le van llegando recuerdos vagos de que dos hombres la tocaban en la cama de su habitación aunque ella los rechazaba. También ha declarado que en esos momentos oía como «maullidos» indicando que «pasara el siguiente».