El Tribunal Supremo (TS) ha confirmado la condena impuesta a Rafael Nicolás Frías por la Audiencia Provincial de Castellón, que lo condenó a 11 años de prisión por apalear y abusar sexualmente de su hija discapacitada y menor de edad de forma continuada.
El sentenciado, que dejó la embarazada en varias ocasiones y llegó a tener un bebé con ella cuando esta tenía 16 años, presentó un recurso en casación y este ha sido desestimado.
El progenitor, que ya había cumplido una pena de cárcel por abusar sexualmente de su sobrina menor, fue condenado por un delito de lesiones en el ámbito de la violencia doméstica, otro contra la integridad moral en forma de malos tratos habituales y otro de abusos sexuales continuados con acceso carnal. Y es que la víctima sufrió, según consta en la sentencia a la que ha tenido acceso este periódico, “golpes, correazos y maltrato constante”.
El juicio por estos hechos, que ocurrieron en el año 2012, se celebró el pasado año en la Ciudad de la Justicia castellonense. La afectada, que tiene reconocida una discapacidad del 55% por padecer un trastorno de la personalidad clúster B, declaró a puerta cerrada. “Era como una niña salvaje y su capacidad comunicativa era la de una niña de 7 u 8 años”, incidieron las psicólogas que trataron con ella, quienes hicieron hincapié en que la menor presentaba una “falta de afecto” y “solo quería estar con su padre y no perderlo”, concretaron.
Las relaciones sexuales incestuosas tuvieron lugar, según la familia, con la misma frecuencia que las palizas que la menor sufría. “La cogía del pelo, le daba puñetazos en la cabeza y patadas”, reveló el hermano de la joven e hijo del ya condenado por los abusos. El joven dijo que la menor y su padre “hacían una vida matrimonial” y que su hermana se había quedado embarazada más de una vez. La tragedia volvió a cebarse el pasado mes de mayo con la joven cuando fue apuñalada en el tórax y el abdomen por dos jóvenes, a los que había conocido en el albergue de transeúntes de Cáritas, cercano al Estadio Castalia, como ya publicó Mediterráneo en exclusiva.
La víctima se debatió durante varias jornadas entre la vida y la muerte en el General y es que recibió una cuchillada próxima al corazón y un traumatismo craneoencefálico severo. Tras días de intensa búsqueda, un ciudadano colombiano, de 20 años, y un alemán, de 27, fueron arrestados por la Policía Nacional como presuntos autores del apuñalamiento y acusados de un delito de tentativa de homicidio. H
