La víctima de una agresión sexual que tuvo lugar el año 2007 en Almassora no denunció hasta ocho años después al hombre que la penetró contra su voluntad por miedo a que volviera a agredirla, a ella o a su familia.

La Sección Primera de la Audiencia Provincial juzga el próximo 9 de mayo, a partir de las 11.30 horas, a A. V. M., para el que la Fiscalía pide un total de 15 años de cárcel. En su escrito, el Ministerio Fiscal considera probado que el denunciado se encontraba en su piso con dos mujeres «vinculadas a su círculo familiar» y que, aprovechando que una de ellas se había quedado dormida en el sofá, cogió a la otra por el brazo y la llevó a una habitación.

AMENAZAS Y AGRESIÓN

Allí, tras cerrar la puerta y «movido por un evidente ánimo lascivo», apagó la luz y, cuando la víctima comenzó a gritar pidiendo ayuda, le tapó la boca con agresividad y la amenazó. «No cuentes nada si no te haré daño, a ti y a tu familia», le dijo, dejándola «totalmente paralizada e indefensa». En ese momento, la desnudó de cintura para abajo y la lanzó sobre la cama, quedando la cara sobre el colchón y las piernas hacia el suelo, y procedió a penetrarla vaginalmente. Posteriormente, e intentando esconder los hechos a la persona presente en el domicilio, con quien le une un lazo familiar, la duchó apresuradamente y la vistió de nuevo, antes de devolverla al sofá junto a la otra fémina.

Las amenazas del agresor surtieron efecto hasta que el 19 de noviembre del 2015, la mujer decidió denunciarle. El silenciamiento de los hechos se debe, según el escrito de la Fiscalía, al «profundo temor» que generaron en la mujer las amenazas que el procesado profirió durante la agresión. Fruto de esta experiencia, la víctima aún sufre una sintomatología moderada depresiva que le provoca trastornos de alimentación y tendencia suicida.

Es por ello que, además de la pena de prisión, el Ministerio Fiscal también exigirá durante el juicio una indemnización de 30.000 euros para paliar los daños morales. Por último, también piden prohibir al agresor acercarse a menos de 200 metros de donde esté la fémina, ya sea su lugar de residencia o centro de trabajo, así como el abono de las costas procesales.

El individuo juzgado tiene antecedentes penales, pero no son computables a efectos de reincidencia porque no tienen relación con el delito por el que será juzgado en apenas una semana.

AGRESIÓN SEXUAL

En marzo, la Audiencia Provincial ya condenó a 15 años un hombre de 50 años, vecino de Vila-real, por abusar de una niña de tan solo 12 años en repetidas ocasiones.