Sharon Stone sufrió en el 2001 un aneurisma cerebral que la ha apartado de los focos hasta ahora, 17 años después, cuando se ha sentido lo suficientemente fuerte como para protagonizar su primer gran proyecto tras la enfermedad, la serie Mosaic de HBO, que se estrena mañana en España a través de la plataforma.

Un proyecto del cual la intérprete confiesa sentirse «muy agradecida», al tener la oportunidad de rodar de nuevo, algo que durante un tiempo pensó que «no volvería a hacer jamás».

Tras su hemorragia cerebral, Stone decidió volcarse en tareas humanitarias, adoptó dos niños y comenzó a aceptar pequeños papeles que no implicasen más de dos semanas de rodaje: no quería estar alejada de sus bebés.

En Mosaic, la actriz interpreta a Olivia Lake, una famosa autora de literatura infantil que vive tranquila en una mansión en la montaña y que durante una gala benéfica se fija en un atractivo joven, aspirante a artista, a quien ofrece a ser mentora y decide acogerlo en su fastuosa casa.

Sin embargo, la inesperada llegada de la novia del muchacho desata los celos de la escritora, que acaba buscando consuelo en otro apuesto hombre, que resulta ser un estafador profesional. El día de Año Nuevo, Olivia desaparece y el único rastro que deja es su estudio bañado en sangre. Es en ese momento cuando la serie se convierte en una intrincada búsqueda del culpable.