Hasta no hace muchos años quien buscaba un golpe de suerte definitivo en la vida, uno de esos que te permitía vivir a cuerpo de rey durante años y dejar arreglado el futuro de hijos y nietos, jugaba a la quiniela. ¿Quién no recuerda una tarda del domingo sentado junto a la radio y comprobando los resultados? 1-X-2. A los afortunados (pocos) que lograban el pleno al 15 --o un 14-- la vida podía cambiarles. Pero las cosas han cambiado radicalmente. La quiniela anda de capa caída, aunque no es el único juego que en Castellón vive sus horas más bajas.

Pese a que sectores como las apuestas deportivas viven un auténtico boom en la provincia, los juegos de competencia estatal no pasan por su mejor momento. El último informe del sector del juego en la Comunitat Valenciana muestra como el dinero que cada año invierten los ciudadanos de la provincia en juegos como la lotería, la bonoloto o la quiniela va claramente a menos. Un dato basta para entenderlo. En el último año la cantidad jugada fue de 103 millones de euros. En el 2008 ascendió a 136. O lo que es lo mismo, un 32% menos.

Pero, ¿a qué se juega en Castellón? La lotería nacional es la reina absoluta, con un gasto global de 60 millones de euros. En el último año esta cifra ha aumentado ligeramente, pero sigue lejos de los 74 millones invertidos en el 2008. A la lotería nacional le sigue la Primitiva. Tiene sus adeptos en Castellón, pero el gasto también va a la baja. Nada menos que ha pasado de 33 millones a tan solo 21.

La bonoloto se mantiene más estable, pero otro juego que pierde aura es la quiniela. El año pasado, los aficionados de Castellón tan solo gastaron en marcar 1-X-2 un total de 2 millones de euros. En el 2008 fueron 8 millones.

Juego privado sin crisis

El volumen de dinero invertido en juegos públicos va de capa caída y el que ya sale de la crisis es el juego privado. En la Comunitat Valenciana, y siempre según las cifras de la Dirección General de Tributos y Juego, casinos, bingos, apuestas y máquinas recreativas lograron una facturación de 2.112 millones de euros, un 9,71% más que durante el ejercicio anterior, cuando fueron 1.925 millones. En total, y sumando los diferentes sectores (juego público y ONCE) el sector ha movido en la Comunitat Valenciana 3.300 millones.

Solamente en casinos (en la Comunitat hay cuatro salas, una de ellas en el Grao de Castellón), los valencianos han jugado en el último año 129 millones de euros y han recibido casi 713.000 jugadores, mientras que el mercado del juego del bingo ha supuesto 270,26 millones, de los que 15,5 corresponden a las salas ubicadas en Castellón. Además, Castellón cuenta con 2.797 máquinas tipo B (juego con premio) y la mayoría se ubican en bares.