Es un momento de extrema dificultad. Los gastos son muy superiores a los ingresos y el modelo de Estado de bienestar que disfrutamos hay que revisarlo, porque es inasumible”. Con esta rotundidad compareció ayer el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, ante los medios de comunicación en el palacio de la Moncloa tras su reunión con Mariano Rajoy, donde desveló que el presidente del Gobierno había aceptado la propuesta que le llevó de celebrar “antes del verano” una “cumbre de presidentes autonómicos” en Valencia con el objetivo de “fijar competencias” y poner en común las medidas a adoptar para controlar el déficit público.

En definitiva, lo que Alberto Fabra ha puesto en marcha, y liderará, es una reunión en la que se redefina el papel que tienen las autonomías, para tratar de compatibilizar el estado de las autonomías con la actual coyuntura económica y las reservas de las administraciones. “Todas las administraciones debemos remar en el mismo sentido, no somos 17 estados que tenemos que competir, tenemos que colaborar en la misma misión, hacer ajustes y adoptar decisiones que nos competen a todos”, señaló Fabra.

El objetivo del jefe del Consell es evitar duplicidades. En definitiva, “adelgazar la Administración, quitarle grasa, diseñar un mapa de competencias nacional para que cada administración hagamos una cosa, la hagamos más barata y la hagamos bien”, subrayó, justo cuando el dato del déficit del 2011, ha subido al 8,51%, la peor de las previsiones, en buena parte por la desviación de las administraciones autonómicas. “No hay suficiente dinero para cubrir todos los gastos”, insistió ayer Fabra, quien defendió la búsqueda de fórmulas que permitan ahorrar dinero y generar más ingresos, objetivo que especificó pasa por “dinamizar la actividad económica y el empleo”. H