Un rayo provocó ayer a primera hora un incendio en el cuadro eléctrico de la iglesia de los Padres Franciscanos de Vila-real, dejando sin luz todas las instalaciones. Los bomberos sofocaron de inmediato las llamas, aunque los daños provocados están siendo evaluados por la orden religiosa, ya que toda la instalación eléctrica ha sufrido desperfectos.

El fuerte temporal obligó a la Policía Local a cortar por la mañana la circulación por la avenida del Cedre con Francia, a la altura de la nueva rotonda, desviando la circulación por Ausiàs March y alrededores, hasta que a las 10.30 horas se reabrió al tráfico. También se cerró, hasta las 11.30 horas, el paso subterráneo de la calle Furs de València para evitar que los coches quedaran atrapados, según explicaron el concejal de Seguridad Ciudadana, Javier Serralvo, y el edil de Servicios Públicos, Francisco Valverde.

En este sentido, desde el PP local lamentaron que las precipitaciones de ayer “colapsaran” en hora punta el tráfico e inundaran varios comercios “por la mala gestión de la obra de la rotonda de la avenida del Cedre”.

Precisamente en esa avenida, los propietarios de una cafetería achicaron un palmo de agua. “Se nos han estropeado las neveras y congeladores”, apuntaba apesadumbrado Jesús, el dueño.

Operarios municipales retiraron un árbol que cayó en la plaza Mestre Vidal, aunque no hubo que lamentar daños. También fue necesario vallar la fachada de una casa en la calle Santa Lucía. H