Había ganas de Cevisama y eso ya se notó ayer en los pasillos de Feria Valencia, mucho más llenos de público de lo que venía siendo habitual para una primera jornada. Esa fue la sensación de la delegación empresarial castellonense que se ha desplazado a Valencia con motivo de la feria del azulejo, una opinión que pondría la primera piedra para consolidar la idea de que esta cita puede ser la mejor de los últimos años.