La bolsa vivió ayer una jornada muy oscura o roja, según como se mire. El Ibex-35 acabó el día con un retroceso del 4,44%, hasta los 8.122 puntos, al nivel de julio del 2013 y la mayor caída en una jornada desde agosto. El temor a una desaceleración mundial afecta de lleno a los 'parquets' y en España la prima de riesgo se eleva hasta cotas no vistas desde hace meses.