El sector citrícola de la provincia de Castellón es optimista en cuanto a la próxima campaña de la naranja se refiere y confía en que esta propicie más y mejor fruta y, por ende, mayores beneficios para los agricultores.

Los representantes de las entidades agrarias consultadas por ese diario --Cooperativa San Isidro, la Unió de Llauradors i Ramaders y Fepac-Asaja Castellón-- así lo explican y estiman que la cosecha se incrementará un 10% debido a las buenas temperaturas de la primera floración y a que el árbol está «descansado» a causa de la mala cosecha del pasado año, considerada como la peor de la última década.

Este año, las buenas sensaciones vuelven al sector y así lo manifiestas las fuentes consultadas. «En principio, se prevé una campaña con un aumento de fruto con respecto al 2017, debido a la buena climatología», destaca José Vallés, gerente de la Cooperativa San Isidro. En el mismo sentido se postulan César Roures, ingeniero técnico agrícola; José Vicente Guinot, presidente de Fepac-Asaja; y Carles Peris, de la Unió de Llauradors i Ramaders.

«VUELTA A LA NORMALIDAD»

«El año pasado fue una mala campaña debido a que ninguna de las dos floraciones fue bien pero este año es diferente, ya que hemos tenido buenas temperaturas a la hora de florecer el árbol», explica Roures. Por su parte, Guinot reitera que «esperamos un moderado crecimiento de la cosecha y vamos a poder mantener la calidad del producto y los precios debido a la mayor producción que esperamos en los huertos de la provincia de Castellón».

Carles Peris también ve «con buenos ojos» la futura campaña, en la que augura «buenos calibres». «Volvemos a la normalidad de hace unos años porque la cosecha del pasado año fue muy mala y hace dos años, fue una temporada de récord histórico, con 800.000 toneladas», explica Peris al periódico Mediterráneo, resaltando la cantidad de producto que hay en los árboles.

Los representantes de los agricultores se muestran optimistas por el cambio de rumbo que ha experimentado el sector en el último año tras una mala temporada de la naranja.

650.000 TONELADAS

De esta forma, y debido a las buenas previsiones, desde la Unió estiman que en la próxima campaña se pueda recoger un aforo total de alrededor de 650.000 toneladas de naranjas en toda la provincia. En cuanto a los trabajadores de la recolección se refiere, César Roures destaca que en torno a 50.000 personas participarán en esta campaña en el huerto en el término municipal de Castellón, donde hay 20.000 hanegadas, y cada una de las personas contratadas recogerá una media de 2.500 kilos por cada una de ellas. A estos trabajadores, hay que sumar los del transporte y los del almacén, entre otros, para alcanzar el total.

Así las cosas, los agricultores castellonenses confían en que la campaña de este año sea buena, a diferencia de la pasada, donde hubo poca fruta y, por lo tanto, escasos beneficios.