La refinería ha generado la electricidad que ha consumido Castellón durante más de 30 años». La frase del presidente de BP España, Luis Aires, muestra la importancia que la planta del Grao tiene en la economía provincial. Con otros datos, como la producción de butano o de queroseno, así como del «asfalto para nuestras carreteras» y de un metal tan apreciado como el aluminio, el máximo dirigente de la multinacional inglesa en España quiso destacar la capacidad de generar riqueza de la instalación, que da empleo a más de mil trabajadores directamente (entre los 470 empleados y los 660 subcontratistas) y a dos mil de forma indirecta.

Asimismo, Aires resaltó que, desde su nacimiento en 1967, la instalación se ha convertido en un polo de atracción de actividad. «Alrededor de nuestra planta se han ido estableciendo empresas», recordó, hasta conformar el polígono industrial del Serrallo, que, «junto al sector cerámico, formamos el motor industrial de la provincia», resaltó ayer.

Esto también se deja ver en el puerto, donde a pesar del continuo proceso de diversificación de tráficos, casi la mitad depende directamente del polígono del Serrallo. «El barco está muy ligado a nuestra actividad», que genera una media de un buque cada dos días, señaló el presidente de BP España. No en vano, los principales países de los que importa el petróleo son Kazajistán, Brasil, Guinea Ecuatorial, Azerbaiyán, Nigeria y Rusia. El producto terminado se distribuye, principalmente, por la Comunitat.

ARRAIGADA

Una tierra que también ofrece mucho a la instalación, sobre todo, «los hombres y mujeres que aquí trabajan», que, resaltó Aires, «sienten la refinería como algo propio, como si fuesen los dueños de la misma». «Esto nos permite poder decir con orgullo que estamos en una de las mejores del mundo», añadió.

Y esto pasa por convertirse, cada vez más, apuntó el presidente de BP España, en una empresa «comprometida con el desarrollo sostenible», que va a jugar «un papel clave en la transición energética hacia un futuro con bajo contenido de carbono». De esta manera, los productos que genera la planta del Grao, son «cada vez más respetuosos con el medio ambiente», afirmó.

Entre ellos citó las gasolinas, «cada vez más limpias y eficientes», y los «biocombustibles de última generación». Asimismo, Aires resaltó que, hace ya «diez años», que en el polígono del Serrallo no se fabrica fuelóleo.

Todo, después de que el presidente de BP España agradeciese a Felipe VI que la planta albergase «su primera visita oficial a Castellón como jefe de Estado».