Solo hace falta dar un paseo por Castellón, Burriana, Benicarló o la Vall d’Uixó para darse cuenta del fuerte relevo comercial al que ha asistido la provincia en los últimos seis años. Pocas cosas son lo que fueron. Donde antes había una ludoteca ahora hay una clínica dental, la paquetería de toda la vida ha desaparecido y se ha convertido en un salón de belleza y en ese locutorio, que hasta hace tres años era un ir y venir de inmigrantes, ahora sirven bocatas, cervezas y cafés. Porque si hay un negocio en Castellón que ha resistido mejor que nadie la crisis es la restauración.

Que el emprendedurismo va a más en Castellón lo demuestran los datos que maneja la Cámara de Comercio en base a la estadística de altas en el Impuesto de Actividades Económicas. En doce meses (de julio del 2013 a julio del 2014) han abierto en la provincia 9.371 nuevas empresas, un 8% más que los doce meses anteriores. Y el ritmo de nuevas aperturas es cada vez mayor. Un ejemplo. De julio a diciembre del 2013 se inauguraron 4.163 negocios. De enero a julio de este año, 5.208, es decir, un 20% más.

Además de la cantidad de empresas, lo interesante del volumen de licencias emitidas en la provincia (en esta lista no están los negocios que se dan de baja) es que plasma qué actividades económicas están auge y cuáles están en claro declive. Si hace unos años Castellón vivió una eclosión de bazares, locutorios, tiendas de compraventa de oro y establecimientos de cigarrillos electrónicos (hace dos años llegaron a abrirse casi un centenar en la provincia) lo que triunfa ahora es la alimentación y la estética. Nada menos que en doce meses se han abierto 181 despachos de pan, 79 fruterías y hasta 111 carnicerías y pescaderías.

Las estadísticas del sector de la estética todavía impresionan más. En un año la provincia ha ganado 158 peluquerías y otros 110 centros de belleza. “Es cierto que hay una eclosión de nuevas peluquerías, pero muchos son negocios malos. Estamos hablando de salones que están reventando los precios y contratando a personal, cuando lo hacen, en condiciones muy precarias, sin cotizarles y con sueldos muy bajos”, denuncia Adolfo Pastor, presidente del Gremio Provincial de Peluqueros, Esteticistas y Maquilladores.

MANDA EL BAR // Pero si hay un sector que sigue triunfando en Castellón es el bar. Aunque es cierto que han cerrado muchos, de julio del 2013 a julio del 2014 se han abierto 1.588 nuevos establecimientos, de los que 217 son restaurantes. El resto son bares, cafeterías y heladerías, con lo que el censo total de establecimientos de restauración supera los 6.000. Todo un récord. Y la tendencia, si se desglosan los datos por semestres, sigue al alza: 602 aperturas en los últimos seis meses del 2013 frente a 986 de la primera mitad del 2014.

Desde el sector destacan que el fenómeno de la apertura masiva de bares no es exclusivo de los últimos doce meses. Al contrario, se repite año tras año. “Siguen abriendo muchos, pero también cierran. La gente cree que para servir detrás de la barra sirve cualquiera, pero luego se dan cuenta que es más duro de lo que parece. Por eso hay bares que duran poco”, reconocen en el sector.

Otro sector en plena transformación es el pequeño comercio. En la provincia han subido la persiana 288 tiendas de ropa en el último año (muchas de ellas franquicias) y 61 zapaterías. Con las clínicas dentales ocurre lo mismo. La provincia suma 12 en el último año, de las que ocho están en la capital. H