Más del 90% de las sucursales del Banco Popular en la provincia de Castellón se emplazan en localidades donde también existen oficinas del Banco Santander, pero en cualquier caso todavía no se ha comunicado oficialmente si la compra del Popular por el Santander implicará concentración de servicios.

En Castellón el Popular tiene 14 sucursales distribuidas entre Castellón (dos), Almassora, Vila-real, Burriana, Nules, Onda, l’Alcora, la Vall d’Uixó, Benicàssim, Benicarló, Vinaròs, Alcalà de Xivert y Moncofa. Pero solo en esta última, en Moncofa, no se solapa con otra del Santander.

En puntos como el centro de Castellón hay mucha proximidad entre oficinas de ambas entidades --una en la plaza de la Paz y la otra en la calle José Zorrilla- o en Vila-real, a escasos metros, una en la plaza Mayor y la otra en la avenida la Murà.

Por ahora, los sindicatos piden al Santander que mantenga la plantilla del Popular, tanto si se deja la marca como si no; y sus condiciones laborales, sociales y económicas; y alegaron la necesidad de personal para seguir prestando servicio al volumen de clientes que ya tenía el banco.

Marta Benito, portavoz de UGT-PV, señaló que la plantilla del Popular ha venido sufriendo ajustes y ahora es joven, de 41 años de media. «El solapamiento de oficinas se da en casi todas las localidades de Castellón. Nos preocupa el empleo», subrayó. Javier Porcar, representante de CCOO, incidió en que han pedido reunirse con las entidades bancarias para que les expliquen «qué van a hacer, protocolos de garantía de empleo y medidas no traumáticas». Los sindicalistas recordaron que la presidenta del Banco Santander, Ana Botín, dijo que la integración «llevará un tiempo» y, mientras, los clientes del Popular no tienen que preocuparse, pues «nada cambiará» y les seguirán atendiendo las mismas personas en las mismas sucursales.