Es este el mejor momento para comprar una vivienda en Castellón? Por unanimidad, la respuesta es sí. Lo dicen constructores, promotores e inmobiliarias, que avisan que el mercado provincial tardará años en reunir las óptimas condiciones que tiene ahora mismo: los precios se han reducido un 30% en pocos años, la oferta de vivienda es amplia (con un estoc de poco más de 20.000 pisos en la provincia según la patronal) y el sector se ha lanzado a la carrera por ajustar al máximo su oferta a las necesidades del cliente.

La principal razón para tratar de explicar por qué es este el mejor momento para comprar un piso es el precio. En la provincia, y según datos de la Sociedad de Tasaciones, el metro cuadrado de vivienda nueva ha pasado de costar 1.915 euros en el 2007 a los 1.735 de este año. Eso, en términos porcentuales significa un recorte del 10%, aunque los promotores hablan de mucho más. “Comprar un piso nuevo ahora en Castellón cuesta de 30.000 a 40.000 euros menos que hace unos años y eso es una rebaja muy importante en el precio”, explican desde una empresa de la construcción asentada en la capital de la Plana.

¿SEGUIRÁN A LA BAJA? // La pregunta que muchos ciudadanos se formulan es que si los precios van a seguir bajando. La mayoría del sector inmobiliario opina que no, al menos, las viviendas que ya están construidas, que ya no se van a abaratar más porque no hay más margen. “Los promotores han descontado los precios hasta el mínimo, situándolos a precios de préstamo y no van a seguir bajando más”, asegura Fermín Renau, actual presidente de la Asociación Provincial de Empresas de la Construcción de la provincia de Castellón (APECC).

Por el contrario, Francisco Nomdedeu, presidente del Colegio Oficial de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria de Castellón (Coapi) es de los que piensan que el precio de las viviendas aún puede ir a menos. “La sensación que tenemos es que todavía van a bajar algo más, al menos a corto y medio plazo”, cuenta Nomdedeu, quien destaca como inconveniente que el precio del suelo sigue siendo alto. “El suelo no ha bajado tanto y eso es un condicionante esencial que ata de manos al constructor”, subraya.

Pero aunque los precios están ajustados y la oferta de vivienda nueva y de segunda mano es amplia, la actividad en el sector continúa al ralentí. Las estadísticas que periódicamente publica el Ministerio de Fomento revelan que en los seis primeros meses de este año se han vendido en la provincia 2.899 viviendas. De seguir a este ritmo, Castellón cerrará el año con un total de 6.000 transacciones, una cifra que se aleja de los datos recogidos para el ejercicio del 2010 (7.687) y también del de 2008 (8.726). Nada tienen que ver estos datos con los del 2006, en pleno boom de la construcción, cuando se consiguieron vender en la provincia de Castellón hasta un total de 21.876 viviendas.

A LA CARRERA POR VENDER // Las promotoras y también los bancos (propietarios de innumerables inmuebles en la provincia) son conscientes de que la actividad del sector no acaba de despegar y la mayoría se ha lanzado a una carrera por intentar atraer al cliente. “Ofrecemos pisos a la carta. Ahora, por ejemplo, damos al cliente la posibilidad de no comprar la plaza de garaje y así el piso le sale más económico” describen en otra promotora de la capital.

Entidades financieras con delegaciones del negocio inmobiliario, como Bancaja Hábitat o Servihábitat de la Caixa mantienen una lucha contrarreloj por vender y ofrecen incluso importantes ventajas hipotecarias. Eso sí, con la condición de que el cliente compre una de sus viviendas.

La mayoría de las entidades financieras consultadas ofrecen descuentos de hasta el 35% en el precio de los pisos, en un intento por ganar liquidez y vender su estoc de viviendas, que no ha parado de engordar en los últimos años. Prueba de ello es que, únicamente entre estas dos cajas, disponen ya de casi un millar de pisos en la provincia. H