La provincia de Castellón cuenta solo con una treintena de familias acogedoras. Una cifra escasa si se tiene en cuenta la triste realidad que viven decenas de pequeños que se encuentran en situación de desamparo. Según datos recientes, el Registro de Familias Educadoras de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas disponía de 31 inscripciones, pero solo cinco familias están disponibles, ya que las otras están cuidando a uno o varios menores.

La Asociación de Voluntarios de Acogimiento Familiar (AVAF) de Castellón remarca «la necesidad» de contar con más personas que estén interesadas en tener en acogida a un menor. «Los requisitos no son muchos, lo más importante es tener una estabilidad emocional y económica, ya que da igual la condición sexual o que se trate de una familia monoparental. Después, los técnicos valoran a las familias para ver la idoneidad», explica Laura Edo, técnica de esta entidad.

En estas entrevistas se hace hincapié en diferentes aspectos, por ejemplo, la motivación para cuidar a un menor y lo que se espera de esta experiencia, las condiciones y limitaciones existentes, la capacidad para cubrir las necesidades de los niños, así como de la familia para adaptarse a la nueva situación. Tras estos contactos, es necesario asistir a unas sesiones formativas de dos a tres horas de duración. El periodo que transcurre para formar parte de este fichero es de seis meses.

Sin duda, este acogimiento es un «hecho totalmente solidario», indica Laura Edo, al tiempo que anima a todas aquellas personas interesadas a dirigirse a la asociación o a la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas para inscribirse en el registro oficial.

CUESTIONARIO

En el cuestionario que se debe rellenar para inscribirse en el listado, entre las cuestiones planteadas, se pregunta a los solicitantes si en los últimos cinco años ha fallecido algún miembro de la familia, el horario laboral, el tipo de contrato, las características de la vivienda habitual, si se dispone de segunda residencia, el número de vehículos y el perfil del menor que se prefiere tener en acogimiento.