El puerto de Castellón generará en los próximos años, por sí mismo o en empresas que dependen de él para exportar sus productos, una inversión que rondará los 200 millones. Una parte provendrá directamente de la Autoridad Portuaria, cuyo presidente, Francisco Toledo, anunció recientemente que ha incluido 69 millones en su plan de inversiones para el periodo 2016-2020.

Estos últimos los destinará PortCastelló a proyectos de infraestructuras públicas. Algunas no son estrictamente de su competencia, como la conexión en autovía de la dársena sur de la CS-22, para la cual ha previsto 12 millones en el caso de que no la construya el Ministerio de Fomento (que debería ejecutarla); o la estación intermodal si finalmente va junto al Serrallo (que necesitaría 15 millones de euros, según anunció Toledo).

Asimismo, la Autoridad Portuaria castellonense también prevé ejecutar la conexión ferroviaria interior en ancho internacional, que tendrá un coste de unos 22 millones de euros y cuyo proyecto podría estar listo a finales de año; o a la construcción de un nuevo atraque de graneles líquidos en la dársena sur junto al de la planta de biodiésel.

tirón sur // Precisamente este espacio, la dársena sur, vuelve a levantar el interés de los inversores. Después de la paralización de diferentes proyectos en los últimos años (la planta de fertilizantes de Agriberia o el almacén de cemento de Cemex, por citar dos ejemplos), la apertura de la carretera de acceso por el polígono del Serrallo parece haber revitalizado el recinto. Tanto es así que Leatransa, que inauguró hace poco más de un año unos almacenes en la zona, invertirá otros 2,5 millones de euros “el próximo año” para construir “otros 10.000 metros cuadrados más, si no pasa nada”, como anunció su director general, José Luis Moya.

Además, la llegada del fondo inversor Kartesia al accionariado de Portsur derivará, si se confirman las previsiones con las que llegaron los accionistas a Castellón, en nuevas inversiones, que todavía están por definir, en la única terminal presente en esta dársena. A ello se suma el interés de una empresa por lograr una nueva concesión en la zona para construir otro almacén, en este caso de materias primas cerámicas, el primero en la zona.

Y es que este recinto es el único por que el puerto de Castellón tiene posibilidades de crecimiento. La dársena norte está prácticamente colapsada, pero ello no ha evitado que otra empresa haya solicitado una concesión de 10.000 metros cuadrados para almacenar contenedores.

Asimismo, tres de las terminales, Noatum, TPC (que ya ha comenzado sus mejoras) y Portsur (que también ocupa un espacio en la dársena norte), han solicitado ampliar el plazo de la concesión, como también la empresa Bulk Cargo, lo que redundará en unos 10 millones de euros de inversión en conjunto. Esta última, además, ha pedido una parcela de 47.000 m2 para construir una nave para almacenar graneles.

inversiones vinculadas // Junto a ello, BP Oil y UBE han anunciado ya inversiones en los próximos años por un montante de 49 millones la primera y más de 50 la segunda con el fin de mejorar sus procesos productivos. Y otra firma, LM Windpower, ampliará su factoría de les Coves de Vinromà después de obtener el compromiso del puerto y la Conselleria de Obras Públicas de determinadas mejoras que le permitan exportar por PortCastelló. H