El concejal de Servicios Públicos de Vila-real, Francisco Valverde, ha asegurado a Mediterráneo que la apuesta del equipo de gobierno liderado por José Benlloch para la gestión del agua potable continúa pasando por la creación de una empresa mixta, en la que el Ayuntamiento «recuperara» el control administrativo del servicio, al contar aproximadamente con el 15% de las acciones, mientras que las restantes estarían en manos de una mercantil que, de alguna manera, «sería el socio tecnológico de esta sociedad».

Y es que, pese a que el ejecutivo local avanzó meses atrás la posibilidad de renunciar a esta empresa mixta, «debido a las limitaciones que impone la ley de estabilidad presupuestaria del ministro Montoro, todo parece indicar que habrá una modificación de la misma que permitirá que, a partir del momento en el que cumplamos al 100% con este requisito podamos empezar a trabajar en la licitación de la concesión», explica Valverde.

En la actualidad, el contrato de la gestión del agua potable está prorrogado, después de que se denunciara el mismo al acabar el plazo de la concesión. Una situación que, como asevera Valverde, «no ha detenido los trabajos de modernización de la red que, en estos momentos, se incrementarán con la implantación de contadores digitales que darán información en tiempo real y permitirán una localización más efectiva de posibles fugas».

PROVEEDORES // En la actualidad, como ya informó días atrás el propio alcalde, José Benlloch, el Ayuntamiento de Vila-real ha regresado a la senda de la estabilidad presupuestaria, excepto en lo referente al plazo medio de pago a los proveedores, que supera el límite normativo. No obstante, aseguró que este asunto se habrá normalizado «en un plazo aproximado de dos o tres meses».