No hay mejor forma de conocer la historia de una localidad que paseando por su calles y lugares más emblemáticos, escuchando los relatos de personas que se han empapado de los capítulos de vida de un pueblo.

Y eso es lo que están haciendo Ernest Peset y Gracia Ripollés, quienes desde el colectivo Recuperem y con la colaboración de la Concejalía de Tradiciones del Ayuntamiento de Vila-real, arrancaron una iniciativa en la que participarán, hasta el 28 de febrero, más de 500 alumnos de segundo ciclo de Primaria.

Una actividad que se enmarca en el programa de las fiestas fundacionales de la ciudad y que incorpora a las visitas didácticas por espacios emblemáticos del municipio una serie de juegos, con yincana incluido, en los que se evalúa lo aprendido paseando por el pueblo y atendiendo a las completas explicaciones que realizan Peset y Ripollés.

Los primeros en estrenar esta peculiar ruta por la historia local fueron los escolares del colegio Pascual Nácher. «Primero se les recibe en el ayuntamiento y realizan una visita por el mismo y después, frente a la estatua de Jaume I de la plaza Major, se cuenta una biografía breve del monarca y el significado del escudo local», explican.

Carta Pobla

El itinerario continúa por la plaza de la Vila, con mención expresa a la Carta Pobla; el Hostal del Rei --los niños preguntan si allí se hospedaron los reyes--; el campanario; la Torre Motxa, como último vestigio de la muralla de la villa --los escolares intentan averiguar si se lanzaban catapultas o cañonazos al muro-; y la Séquia Major, con referencia a sus usos históricos.

El jardín de Jaume I pone punto final al recorrido con el yincana de repaso histórico.