El alcalde de Vila-real, José Benlloch, decidió ayer dar la cara para valorar la denuncia presentada por la Fiscalía a raíz de una denuncia del PP sobre posibles irregularidades en el pago de unas facturas a la empresa de coaching Ypsilon, que asesoró años atrás al consistorio en materia de turismo, publicidad e imagen.

Benlloch aseguró estar sufriendo una “cacería” por parte del PP “porque todos los contratos fueron legales”. Y arremetió contra el Ministerio Público por no haberle comunicado que estaba siendo investigado y anunció medidas judiciales contra los populares si se demuestra que la denuncia formulada fue “falsa”.

El primer edil estuvo arropado por varios de sus concejales, entre los que estaban Emilio Obiol y Sabrina Escrig, sobre quienes también se dirige la denuncia, junto a la administradora única de Ypsilon, Yolanda Souto. El Ministerio Público halla indicios de un posible delito de malversación y falsedad documental, por lo que pide al tribunal su imputación. El fiscal cree que se pudieron contratar servicios superiores a 18.000 euros sin haber realizado la contratación pública que requiere dicha cuantía.

Según el alcalde de Vila-real, “este decreto es histórico por la cantidad de anomalías que comprende”, ya que considera que no se han cotejado los documentos con facturas originales ni tomado declaración a los técnicos. Benlloch ha denunciado el procedimiento, porque ni siquiera se les dice de qué se les acusa ni se les “ha dado la oportunidad” de defenderse, lo que genera “una tremenda indefensión”.

CRÍTICAS AL FISCAL // Y es que el dirigente socialista arremete contra el fiscal jefe, José Luis Cuesta, al que llamó ayer personalmente por teléfono --aunque antes de su comparecencia no pudo hablar con él--, “porque esta actuación no tiene nombre. No nos han permitido explicarnos como sí sucedió en el caso de Piaf o las entradas de toros con los investigados. Todo huele fatal”. Y es que Benlloch, quien denuncia “la confusión alarmante del fiscal”, ve fines electorales a solo seis meses de los comicios municipales.

“Estamos viviendo una persecución política en toda regla. El PP nunca ha aceptado no tener el poder en Vila-real y están dispuestos a lo que sea para volver”, lamentó el alcalde, quien no pudo disimular su malestar por la situación. “Para destruir al gobierno local, el PP de Héctor Folgado es capaz de todo, quiere vernos en la cárcel”, aventuró el munícipe.

“No voy a dimitir si me imputan porque no he podido explicarme y quiero declarar delante de alguien. Quiero que el juez me cite de manera inmediata y no se juegue con los plazos”, sostuvo.

En cuanto al proceso judicial, fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat (TSJCV) aseguraron ayer que esta denuncia, fechada el 13 de noviembre, aún no está registrada, ya que el decanato tarda días en asignar casos a un juzgado de instrucción.

DEMANDA A FOLGADO // El alcalde aprovechó la comparecencia para anunciar que este mes de diciembre interpondrá una demanda civil por daño al honor contra Héctor Folgado por el polémico caso de los ambientadores. H