La Policía Local de Vila-real ha concluido ya la campaña de vigilancia y control del cinturón de seguridad y de los sistemas de retención infantil (SRI) en los vehículos, que se ha desarrollado entre los días 13 y 19 de marzo, y que se ha saldado únicamente con cinco denuncias, de las que cuatro han sido a conductores y una a uno de los pasajeros.

A lo largo de una semana, los agentes adscritos a la Unidad de Tráfico han efectuado un total de 412 inspecciones, de manera que el resultado obtenido es que solo un 1,2% de los usuarios de los vehículos han sido denunciado por no circular con el correspondiente sistema de retención.

«Pese a unos resultados que no son nada malos, con poco más de un 1% de infractores, nuestra obligación es seguir insistiendo en lanzar el mensaje de que el cinturón de seguridad es un seguro de vida que hay que llevar siempre abrochado», apunta el concejal del área, Javier Serralvo, quien señala que no llevar los sistemas de retención pertinentes es una infracción grave que acarrea una multa de 200 euros, así como la pérdida de tres puntos del carnet».

«Continuaremos trabajando para concienciar, tanto a los conductores como a los acompañantes, con la finalidad de evitar muertes innecesarias en la carretera», asevera el concejal Serralvo, al tiempo que recuerda que «el cinturón de seguridad reduce a la mitad el riesgo de fallecimiento en caso de accidente y de padecer lesiones graves». E incide en el uso correcto de los sistema de retención infantil.